¿Cuántas etapas tiene el ciclo de vida del producto? - JR Marketing
Etapas del ciclo de vida del producto.
La vida útil de un producto se asemeja más o menos a la vida de una persona, pasando por diferentes etapas desde que nace hasta que muere. El ciclo de vida de un producto lo marcan varios factores:
- Tipo de producto.
- Velocidad de adopción del producto.
- Características del público objetivo.
- Tecnología disponible para su desarrollo.
- Capacidad de innovación de la competencia.
- Estacionalidad.
- Etc.
Las etapas del ciclo de vida del producto son:
- Introducción.
- Crecimiento.
- Madurez.
- Declive.
A continuación vamos a ver en detalle cada una de ellas.
1. Introducción.
Es la primera etapa, aquí el producto acaba de ser lanzado al mercado donde sus ventas crecen lentamente y sus beneficios son prácticamente nulos. La duración de esta etapa está marcada por el grado de complejidad del producto, de su capacidad para satisfacer las necesidades de la persona consumidora, de la velocidad con la que se dé a conocer el producto, de la influencia de la moda, etc. Si esta etapa es muy larga se tiene el riesgo de que el producto acabe siendo un fracaso.
Durante esta etapa apenas hay productos sustitutivos. Las versiones que se ofrecen del producto suelen ser esenciales y ofrecidas a un precio alto, para captar a las personas innovadoras a través de intensas campañas de promoción del producto, para lograr así su prueba.
2. Crecimiento.
En esta segunda etapa, las ventas del producto empiezan a crecer y por consiguiente los beneficios aparecen, llegando a su máximo al finalizar esta etapa.
Gracias a la labor de los innovadores y adoptadores la primera mayoría empieza a hacerse eco de los beneficios del producto, llegando así a un mayor número de personas. También aumenta la presencia de nuevos competidores y de productos sustitutivos, lo que lleva a utilizar nuevos canales de distribución, siendo estos cada vez más eficientes para no perder cuota de mercado.
El producto empieza a tener diferentes versiones para adaptarse a las necesidades de quienes lo consumen, además, las prestaciones son notablemente mejoradas (sobre todo en los productos tecnológicos).
El precio sigue siendo alto, pero empieza a bajar para facilitar su adopción por parte de un mayor número de personas (adoptadores, primera y segunda mayoría). Esto es en buena medida porque la inversión en publicidad es todavía elevada, pero, se va creando una preferencia de marca y el producto se va posicionando en la mente de la persona consumidora.
Algunos de los riesgos que se puede correr aquí son no distribuir correctamente el producto para satisfacer la demanda, que el producto no sea adoptado por la mayoría, etc.
3. Madurez.
La demanda en esta etapa llega a su máximo y las ventas se estabilizan. Cuando se demanda el producto es porque necesita ser repuesto o porque se crea una nueva variante que satisface las necesidades concretas de un segmento de la población.
Los beneficios se estabilizan mientras que hay más oferta que demanda, dando lugar a que los competidores menos fuertes desaparezcan del mercado.
Esta es la etapa más larga del ciclo de vida del producto, gracias a la mejora del producto y a encontrar nuevos nichos de mercado a los que dirigirse, además, la publicidad en esta fase más que anunciar los beneficios del producto, recuerdan que el producto sigue estando disponible y aparece la publicidad que tiene como fin el posicionamiento y fidelidad de marca.
Los productos sustitutivos son cada vez más parecidos y la guerra de precios se iguala, diferenciándose más por los servicios asociados al producto, que por las características del mismo.
4. Declive.
Es la última fase, las ventas se reducen sensiblemente y los beneficios desaparecen, al igual que los competidores. El producto se va quedando con pocas versiones. Los precios se reducen notablemente para facilitar la eliminación del stock del producto, utilizando acciones como liquidaciones, descuentos, etc.
Algunos productos aunque entren en la fase de declive pueden seguir satisfaciendo a un segmento muy concreto del mercado, que bien por sus gustos particulares o bien para ser coleccionados siguen buscándolos. En este último caso, el precio del producto puede ser incluso más alto que cuando estaba en su etapa de introducción.
Algunos de los motivos por los que fracasa un producto son:
- Cambios en las preferencias de los consumidores.
- Avances tecnológicos.
- Cambios en la legislación.
- Etc.
Resumen de lo tratado hoy:
Hasta aquí la publicación de la semana, espero que te encuentres bien. un abrazo grande.
Refrán de la semana:
Con las glorias se olvidan las memorias.
JR Marketing
Comentarios
Publicar un comentario